Tomás Ángel Miguelez, entrenador del Juvenil B, ha pasado por los banquillos de La Bañeza, Astorga, Soto y Puente Castro, llegando a la Cultural esta temporada.
¿Cómo compaginas tu vida entre los banquillos y la Jefatura de policía?
Con mis compañeros organizo mis cuadrantes con un poco de margen, cumpliendo todas mis horas, con los tres días que tenemos de entrenamientos. Compatibilizo el trabajo, la familia y el fútbol, que es mi pasión.
¿Cuáles son los objetivos de este equipo?
El objetivo principal es formar y surtir al Juvenil A transmitiéndole el gen competitivo necesario a los chavales. Soy un fiel defensor de la preparación del jugador a través de la competición y que lleven unos conceptos claros cuando suban.
¿Qué diferencias existen entre el Juvenil A y el B?
En el Juvenil A, además de la formación, se le exige rendimiento y competitividad. En el B se persigue sobretodo la formación y la preparación de los jugadores para cuando suban al Juvenil A.
¿Y con el resto de equipos del grupo?
Hay pocas diferencias. Al ser nosotros un equipo dependiente de otro hay que acondicionarse a si te cogen a algún jugador, pero eso es meterse en el papel, saber en el puesto que estás y a partir de ahí trabajo muy a gusto con este equipo.
¿Cuál crees que es el futuro de la Base?
Con las bases que se están poniendo este año creo que los chicos van a tener la ilusión de volver a la Cultural, porque hasta ahora no es así.
¿Qué mensaje le gustaría mandar a los padres de la Base?
Sobre todo que tengan paciencia y confianza en este proyecto porque las bases que se están fijando en el Club son muy buenas. La prioridad son los chicos en todas las etapas, desde los chupetines hasta el juvenil A, y creo que se está trabajando muy bien con un personal muy preparado.
#CachorrosCultu