Se jugará el playoff de ascenso a Segunda. Sin público, lejos de casa, pero se juega. La posibilidad del verano se atisba en León. El verano más difícil. Verano de mascarillas, verano de distancia, verano de abrazos dados con el codo. Hubo días en los que pareció que no llegaría. Los días largos, el fútbol, el volver a ver jugar a la Cultu. En lo más profundo del invierno parecían tan lejos como todo lo que había pasado hasta entonces. Los meses de imbatibilidad en casa, el apear en Copa al Atleti del Cholo, la recuperación en los resultados a tiempo, justo antes del parón. Todo detenido, mientras no dejábamos de perder cosas. Personas, familia, la calle, la libertad, el fútbol. Éste ha vuelto y ha vuelto así: tan lejos de casa, vacío de gradas. Hacia Marbella se encamina la Cultu con la ambición de hacer historia. Domingo 19 de julio. Buen día para comenzar el verano.
“Luchad y ascended”. Con ese grito amanece León estos días. A los pies del Reino, Botines, Guzmán. “Ascended por León”. Una ciudad que quiere volver a llenar sus calles con el fútbol de Segunda División. La Segunda B no es nuestra categoría. Me da igual lo que digan los números, tantos años hundidos en ella, no es la nuestra. No, no, no. Está a tres partidos. Huir del invierno esta vez, que corto se hizo el verano la última. Domingo 19 de julio, Marbella, Yeclano, primer rival en esta batalla. “Luchad y ascended”. El león ha afilado las garras en este confinamiento. Trabajo fuerte, objetivo claro y muchos santos. Porque en León tenemos a varios que visten de corto. Leandro, Iván, Dioni como antes lo fueron Ovalle, Marianín, Ángel Luis, Ramonín, Ballesteros, Gallar. Kawaya, Rodas y Gudiño no estarán en el primer partido por sanción. Pero también tienen altar. Como Menudo, Luque, Castañeda, tantos otros. No se puede escapar. Por la ciudad, por los que nunca faltan en el Reino, por lo que se fueron, por los que vienen. Que Barcelona B, Atlético B, Logroñés o Yeclano, el mismo Yeclano, no vuelvan a ser cocos para un equipo que tiene el armario lleno de fantasmas. Por ese escudo que se lleva al pecho y que representa tanto, a tantos, porque León merece un largo tiempo en Segunda.
Por eso a vosotros os encomendamos, santos. Con este rezo. ¡Cultural ganará, ra!
Y que el verano acompañe para volver a bañarnos en la fuente de Guzmán.
Patricia Cazón
