El fútbol es mucho más que números. El estado de ánimo, el trabajo, la fe y la inercia ganadora van más allá de lo que puedan dictar unas estadísticas puntuales. Pero las matemáticas, cierto es, pocas veces mienten. Y esta Cultural es una apisonadora. Por eso, además de llevar ya cinco victorias consecutivas (cuatro en Liga y una en Copa), el conjunto dirigido por Rubén de la Barrera presenta cifras históricas que encienden el orgullo de la afición culturalista. A saber: mejor goal average del fútbol nacional (15 goles a favor y 4 en contra), máximo goleador del Grupo I y segundo máximo goleador de toda la Segunda B, sólo por detrás del filial del Barcelona. Datos que ejercen de fiel espejo donde se refleja la realidad de un equipo que vence y convence, dueño de un fútbol de alta escuela que hacía muchos años que no se veía por estos lares.
No se cansa de repetir Rubén de la Barrera que la clave del éxito está en las ganas y el esfuerzo incondicional que muestran sus pupilos, tanto los que juegan como los que no lo hacen. El vestuario es una piña y eso se nota también en los entrenamientos. Competencia sana, sin fisuras, sin divismos y sabiendo que el equipo está por encima de todo. Qué razón tiene Rubén cuando dice que ojalá se pudieran hacer más de tres cambios durante los partidos. Pero que no se quite méritos el técnico gallego, que sus variantes tácticas también están llamando la atención dentro y fuera de León. No basta sólo con tener los mimbres. Después hay que entrelazarlos. Y el Comandante en Jefe de este ejército blanco (y rosa) llamado Cultural sabe bien cómo hacerlo.
Llega el Caudal al Reino, aunque en estos momentos el nombre del rival sea lo de menos. Lo importante, como diría Luis Aragonés, es ganar, ganar, ganar y volver a ganar. Y en eso está la Cultural. Sumando victorias y multiplicando ilusiones.
Caudal: Dos victorias, dos empates y tres derrotas, es el balance que arroja el equipo entrenado por el exjugador oviedista Iván Ania. El pasado fin de semana obtuvo un meritorio empate ante la Ponferradina, aguantando con un hombre menos durante toda la segunda parte. Su portero Bussmann fue el expulsado y hoy no juega. Baja importante.
A seguir:
Braulio: Debutó la pasada jornada con el Caudal y sólo tardó siete minutos en hacer su primer gol. Un delantero centro con amplia experiencia en Primera y Segunda División del que lamentablemente también se recuerdan sus problemas judiciales de 2012. A sus 30 años, el jugador canario sigue siendo un peligro. Ojo con él.
Chechu Grana: El portero avilesino, cedido por el Sporting de Gijón, tiene hoy la difícil tarea de suplir al alemán Bussmann, expulsado la pasada jornada. Se trata de un guardameta de sólo 20 años, con proyección pero con escasa experiencia en la categoría. Veremos cómo templa los nervios.
Javi Sánchez: Futbolista con movilidad, visión de pase y olfato de gol. Se mueve como pez en el agua por todo el ataque, ya sea por zona central o por ambas bandas. En el último partido contra la Ponferradina marcó y asistió. Lleva varias temporadas en el club de Mieres y es uno de sus símbolos.
El día de?
Benja
Ya se sabe que los delanteros viven (y comen) del gol. Con sus cinco tantos en siete encuentros de Liga, el jugador catalán está cumpliendo sobradamente con las expectativas (dos chicharros en la última victoria ante la Arandina). Y Benja no es sólo remate. Especialista en fijar defensas, su juego de espaldas a la portería contraria favorece la incorporación de sus compañeros al ataque. Jugador clave en esta Cultural.
Por David Acosta
